jueves, 13 de agosto de 2009

Primer escrito narrativo

¿Dónde está Juan?

Por: Margarita María Montoya Zuluaga

El 21 de enero de 2009, el paisa Juan Guillermo Montoya Zuluaga desapareció en las inmediaciones de su sitio de trabajo. Ese día, a la hora de costumbre, nueve de la mañana, llegó como siempre estacionando su camioneta, para entrar a su oficina localizada en el número 3301 de calle 71, en el Noroeste de Miami, Florida. Luego salió a realizar una diligencia relacionada con el cobro de unos dineros ya que vendía jeans para toda clase de público y nunca más se supo de él. Hasta hoy es un completo misterio su paradero.

Este paisa había llegado hacía diez años a Miami buscando el sueño americano y hoy desafortunadamente lo que le queda a su familia es la pesadilla de no saber dónde se encuentra o qué sucedió con él.

Ese 21 de enero, su socio encontró el carro, en el que todos los días él se transportaba para ir a su trabajo a pocos metros de la bodega donde tenía la venta de jeans, con todos sus objetos personales, papeles, licencia de conducir y documentos de identificación, lo único que no aparecieron fueron las llaves del carro.

Según vecinos del sector el señor Montoya se bajó de su carro, saludó como era su costumbre y en todo ese día no fue visto, lo que llamó la atención de los comerciantes vecinos de su bodega quienes llamaron a sus familiares para preguntar si algo le había ocurrido, ya que por error había dejado el carro abierto y esto hizo que se produjera la alarma. Lo que inmediatamente preocupó a su familia y se dio paso a llamar a las autoridades competentes las cuales han llevado el caso desde ese mismo momento. Para este caso se abrió el expediente con el número PD090121032759, además está asignado a agentes del FBI y al detective M. Cáceres quién está haciendo las investigaciones de dicha desaparición.

Hasta el día de hoy no se sabe absolutamente nada de él, se desconoce su paradero, las cámaras que están cerca al sitio de su desaparición no registran nada fuera de lo común, y su familia, su esposa y sus hijos se encuentran desconsolados sin tener hasta el momento ninguna pista que los lleve a saber en qué lugar se encuentra Juan Guillermo Montoya.

Ellos han repartido volantes, camisetas con su foto y prácticamente han empapelado a Miami con afiches en muchos puntos de la ciudad, todo ello con la esperanza de una noticia que los pueda llevar a su paradero. Las descripciones físicas del señor Montoya, de 48 años de edad, son: tez blanca/hispano, cabello negro, ojos color café, estatura 5´11”, peso 170 libras.

Pero ni empapelando la ciudad les ha servido de algo, todo ha sido en vano, nada han podido saber y Juan no aparece por ningún lado.

Hay una madre que se encuentra enferma y angustiada sufriendo en Colombia la desaparición de su hijo, la cual solo le pide a Dios que le devuelvan su hijo en el estado que se encuentre, vivo o muerto, para así ella poder descansar de tanta búsqueda y angustia, o poder darle eterna sepultura en Medellín.

Solo queda rogar a Dios y esperar que situaciones como la que vive ahora la familia Montoya Zuluaga, no sigan ocurriendo en ningún lugar del mundo.

Si alguien llega a ver o tener noticias acerca del paradero de Juan Guillermo Montoya, pueden comunicarse con los teléfonos del FBI, o del detective M. Cáceres, D.C.B. – Missing Parsons Unit, o con sus familiares a los números 305-418-7201 y 305-476-54-23.

5 comentarios:

  1. Este escrito presenta una redacción muy clara y bien descrita, donde además de contar una historia triste y desesperante, nos la hace sentir involucrándonos en ella.
    Aunque tu escrito no está narrado como si fuera tu propia vivencia, sabemos que el ejercicio se trataba de eso y creeme que siento mucho que estes pasando por ese dolor tan grande. Que Dios les de, a ti y a tu familia, la fortaleza necesaria para afrontarlo.

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  2. Es un escrito impactante porque de una manera sencilla se narra la realidad actual de una familia; con palabras claras y concisas se involucra al lector para continuar con la lectura y el desenlace de la misma.

    Narración y realidad, dos palabras que van de la mano y que ligadas logran cautivar a muchos lectores. Felicitaciones por este importante escrito que nos deja un sinsabor amargo a cerca de un familiar que no regresa, hechos a los cuales no escapamos y vivimos a dirio en nuestra realidad.

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  3. Por Edward Alvarez.

    Este escrito combina la estructura de una nota periodística con el estilo de una crónica, puesto que maneja información puntual, pero también toca una parte del lector a fin de conmover y permitirle a este elaborar juicios sobre la misma, no sobra información y cada detalle es importante para la estructura del texto en si, además da detalles que dejan notar el esfuerzo del escritor por estructurar la nota y el proceso de investigación que hizo para escribirla, el manejo de la ortografía es bueno aunque me surgen dudas de la redacción pues se muestran partes un poco confusas como esta " Luego salió a realizar una diligencia relacionada con el cobro de unos dineros ya que vendía jeans para toda clase de público y nunca más se supo de él" allí sale sobrando el “ya que” solo decir que salio a cobrar unos dineros de su empresa de comercialización de jeans era suficiente, a pesar de ese pequeño detalle el resto esta muy bien estructurado

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  5. El lector al empezar la lectura del escrito de Margarita puede llegar a multiples congeturas pues la descripción realizada del acontecimiento permite jugar con la imaginación, del mismo modo la descripción de esta nota posibilita el ubicarse en el momento en que sucedieron los hechos posibilitando la esperranza que al final del texto aparezca Juan. Es importante destacar la manera de este escrito por que es como un relato pero al mismo tiempo un reportaje llevando tras el sendero de acontecimientos tragicos a lectores solidarios con el dolor de otros

    Lida Elena Restrepo

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